martes, 11 de septiembre de 2012

SUCIOS TRAIDORES HITLERISTAS


¿Hitler Judio? Un investigador Alemán Identifica a Hitler como un Sionista y un Traidor

“La campaña de miedo fue exclusivamente contra los judíos, pero Hitler ocultó bien los nombres de los judíos sionistas que, con la más gran de brutalidad y desdén por la comunidad judía, habían planificado la Revolución Mundial y la fundación del ilegal Estado de Israel. Esta es evidencia contundente de que Hitler trabajó de la mano con los Sionistas y que él era un mentiroso de primera clase, un hipócrita y un traidor”.
El 30 de Enero de 1933, Adolf Hitler se convirtió en Canciller del Reich Alemán. Cuando asumió el poder, estaba rodeado de cuatro consejeros principales y sus patrocinadores financieros.
Detrás de él estaba Henry Ford; detrás de él Hjalmar Schacht y Rabbi Leo Baeck y adelante de él, Franz von Papen. Una foto interesante aparece cuando uno toma una mirada de cerca a estos cuatro asesores.
1. Henry Ford(30 de Julio de 1863 – 7 de Abril de 1947) fue un masón del rito escocés, grado 33. En 1919 Ford publicó un libro titulado “El Judío Internacional”. En Alemania “Der International Jude” fue pronto impreso varias veces. En los libros oficiales de historia, Henry Ford es siempre presentado como un anti-semita. En realidad Henry Ford fue todo lo contrario, él era un agente del sionismo encargado de llevar el anti-semitismo a Alemania y al centro de Europa. Al poner a los judíos en el exilio, así podría llevarse a cabo el plan de crear el ilegal Estado de Israel.
Edwin Black escribe en “La Conexión Judía” (página 4) “…, Ford mostró su camaredería con el pueblo judío – tanto a los judíos inmigrantes del Este de Europa que trabajan en la fábrica como a sus amigos judíos a quienes trataba con igualdad, como a su vecino, Rabbi Leo M. Franklin, quien recibió un coche a su medida todos los años como regalo de cumpleaños”.
De acuerdo a Wikipedia, Rabbi Franklink era un miembro de la “Liga de Antidifamación”, la cual es nada más que una organización clandestine de la Logia B´nai B´rith y más allá de la Masonería del Más Alto Nivel.
De acuerdo a www.reformation.org: “Lo que la mayoría de gente no se da cuenta es que Ford Motor Company era una subsidiaria de Standard Oil Company de los Rockefeller”. En el libro “Secretos de la Reserva Federal” de Eustace Mullins, comprendí que la familia Rockefeller estaba vinculada estrechamente a las familias Rothschild y J.P. Morgan, particularmente con respecto al establecimiento del Banco de la Reserva Federal en 1913.
2. Hjalmar Schacht (22 de Enero 1877 – 3 de Junio 1970) era un masón del rito escocés. Él estaba conectado al English Scottish Rite Freemason Montague Norman y consecuentemente al Banco de Inglaterra de la City de Londres. Tal y como Eustace Mullins escribió en “Secretos de la Reserva Federa”, el Banco de Inglaterra está bajo el control de la familia judía Rothschild.
3. Rabbi Leo Baeck (23 de Mayo de 1873 – 2 de Noviembre de 1956) era un masón del rito escocés, grado 33 y un promotor de los planes judeo-sionistas. Gerd Schmalbrock escribió: “El Dr. Leo Baeck era un masón del grado 33, líder de la conferencia alemana de rabinos y Großpraeses del distrito alemán de la orden judía B´nai B´rith. A fin de exponer la profunda sabiduría de los Nacional-Socialistas, él fue el asignado por Hitler para ser Presidente de la Diputación del Reich de los Judíos Alemanes”.
4. Franz von Papen (23 de Octubre de 1879 – 2 de Mayo de 1969) era un Caballero del Santo Sepulcro, una de las órdenes más altas dentro del Vaticano. Él fue el encargado para liderar la promoción de Hitler de tal manera que durante la distribución de poderes el Vaticano no quedara con ninguna desventaja.
Hitler mismo no sólo era miembro de la Orden de Thule, si no también miembro de la Orden Mágica 99. Los detalles de los procedimientos de esta orden pueden encontrarse en el libro de Franz Bardon “Frabato el Mago”. Después de una revisión minuciosa de esta constelación puede decirse que Hitler era un agente del Sionismo judío, del Vaticano y del Banco de Inglaterra (City de Londres).

La evidencia más importante que respalda esta aseveración es:

1.- En 1925 el libro “Mein Kampf” de Adolf Hitler fue publicado. A lo largo de sus setecientas y más páginas, los judíos son condenados por completo. Él escribe como si el ciudadano judío promedio hubiera inventado los Protocolos de Sión y la Revolución Mundial. Esto es estúpido ya que no se trata del pueblo judío, si no más bien de unos cuantos judíos específicos. Especialmente, aquellos dentro de sociedades secretas que pretendían moldear el mundo, por ejemplo, Karl Marx (Rito Escocés, grado 33).
¿Dónde están sus nombres? Hitler, quien se supone que es la persona que más odia a los judíos en el mundo, no tiene absolutamente nada que decir de judíos tales como Adophe Cremieux, Theodor Herzl, Parvus-Helphant, Leo Trotzky, Kaganovich, los Warburgs, los Rothschilds, Trebitsch-Lincoln, Bernhard Baruch, Mandell House y Walter Rathenau, tan solo por mencionar algunos. Esto es por completo ridículo.
Estos nombres tendrían que resultarles familiares a Hitler, ya que habían sido mencionados por Henry Ford en su libro “El Judío Internacional” y son conocidos para cualquiera interesado en la política. Hitler abiertamente destila odio contra la masonería la cual se supone que sirve a los judíos, aún así se reúne en secreto con masones extranjeros de los más altos rangos para para preparar la toma del poder. El nombre de la Logia B´nai B´rith, la cual pertenece al núcleo de la masonería, todo lo cual es omitido por igual en el libro de Hitler.
Este es un ejemplo de supresión consciente de la verdad y una traición tanto al pueblo alemán y judío. La campaña de miedo fue exclusivamente contra los judíos, pero Hitler ocultó bien los nombres de los judíos sionistas que, con la más grande brutalidad y desdén por la comunidad judía, habían planificado la Revolución Mundial y la fundación del ilegal Estado de Israel. Esta es evidencia contundente de que Hitler trabajó de la mano con los Sionistas y que él era un mentiroso de primera clase, un hipócrita y un traidor.
2. El 25 de Agosto de 1933, el acuerdo de Ha´avara entre Hitler y los judíos sionistas se rubricó. El 24 de Marzo de 1933, los sionistas declararon la guerra a Alemania y cinco meses después Hitler firmaba un acuerdo con ellos.
3. El 10 de Septiembre de 1933, un acuerdo Iglesia-Estado, el Reichskonkordat, fue sellado entre Hitler y el Vaticano.
4. El 3 de Mayo de 1940, el ejército inglés fue derrotado en Dunkirk por el ejército alemán. Por órdenes de Hitler, los 330,000 soldados ingleses que quedaron se les permitió regresar a Inglaterra, pero tuvieron que prometer regresar más tarde y destruir por completo a Alemania. El ejército inglés cumplió. Un caso extramadamente único en la historia de la humanidad. Por favor haz referencia al capítulo de “Dunkirk y Después” en el libro del Capitán A.H.M. Ramsay “La Guerra Sin Nombre”.
5. El 18 de Enero de 1941, Hitler recibió una oferta de cooperación de la organización clandestina sionista N.M.O. (Organización Militar Nacional, Irgun Tzwa´i Le´umi), Menachem Begin, casualmente pertenecía a este grupo. Hitler aceptó la oferta y el resultado visible fue la fundación del campo Theresienstadt en la primavera de 1941. H.G. Adler reporta en detalle sobre esto en su libro “Theresienstadt 1941 – 1945″.
6.- El 20 de Enero de 1942, la tristemente célebre conferencia de Wannsee toma lugar. Usando esta conferencia como base, la prensa internacional y muchos libros de historia concluyeron que había tenido lugar la “exterminación completa de los judíos europeos”. Una investigación del documento, no obstante, saca a la luz detalles totalmente distintos. De hecho, no contiene ni una sola frase acerca del asesinato de judíos, nada más una sección que indica sobre el plan de la SS (Schutzstaffel) de Hitler para construir una élite judía. Otro caso más de la habitual distorsión de la verdad por parte de las potencias aliadas contra Alemania.
1945: Adolf Hitler escapa hacia Suramérica. Cualquier investigador de historia que no tome en consideración la participación en sociedades secretas por parte de la élite en el poder, por ejemplo: banqueros, políticos y presidentes de grandes empresas, no es capaz de descubrir apenas del 50 por ciento de toda la verdad.
O, como Cristo dijo: “No hay nada oculto que no vaya a ser revelado, ni nada secreto que no vaya a salir a la luz”. (Lucas 8:17). Me llamó particularmente la atención estudiar esta línea de pensamiento gracias al libro “Adolf Hitler – Fundador de Israel”, por Henneck Kardel.
Este es un capítulo del libro “Secret Politics-3″.